Patatas al horno con crema agria y cebollino

 

1 – Precalienta el horno: Precalienta el horno a 200°C (400°F) y cubre una bandeja para hornear con papel de hornear o papel de aluminio para facilitar la limpieza.

2 – Prepare las patatas: Frote las patatas russet con agua corriente fría para eliminar la suciedad o los restos. Séquelos con un paño limpio. Con un tenedor o un cuchillo afilado, pinche las patatas varias veces por todos lados para permitir que escape el vapor durante la cocción.

3 – Cubrir con aceite de oliva y sazonar: Coloque las patatas perforadas en la bandeja para hornear preparada. Rocíalas con aceite de oliva y usa tus manos para frotar el aceite uniformemente en la piel de cada papa. Espolvorea generosamente sal y pimienta, asegurándote de que el condimento se adhiera a la superficie engrasada.

4 – Cocine las patatas: Transfiera la bandeja para hornear al horno precalentado y cocine las patatas durante 50-60 minutos, o hasta que estén tiernas al pincharlas con un tenedor y la piel esté crujiente. El tiempo de cocción puede variar según el tamaño y grosor de las patatas.

5 – Prepara los aderezos: Mientras se cocinan las patatas, prepara el aderezo con crema agria y cebollino. En un tazón pequeño, combine la crema agria y el cebollino fresco picado. Mezclar hasta que esté bien mezclado. Si lo desea, puede personalizar la cobertura con ingredientes adicionales como queso cheddar rallado, trozos de tocino cocido o cebollas verdes picadas.

6 – Sirve y disfruta: una vez que las patatas estén completamente cocidas, retíralas del horno y déjalas enfriar un poco durante unos minutos. Corta con cuidado cada papa a lo largo por el centro, teniendo cuidado de no cortarla por completo. Esponje suavemente el interior con un tenedor para crear una textura esponjosa. Vierta una generosa cucharada de crema agria y cebollino sobre cada papa, permitiendo que se derrita ligeramente en la carne caliente. Sirva inmediatamente y disfrute de la irresistible combinación de crema agria cremosa, cebollino aromático y patatas perfectamente cocidas.

En breve:

Ya sea que se sirva como guarnición satisfactoria o como plato principal reconfortante, las papas al horno con crema agria y cebollino seguramente deleitarán su paladar y satisfarán sus antojos. Por su sencilla preparación y su atractivo versátil, son perfectos para cenas familiares, reuniones informales o veladas íntimas. Así que reúne tus ingredientes, precalienta el horno y prepárate para saborear el simple placer de unas patatas perfectamente cocidas cubiertas con cremosa crema agria y fragantes cebollinos.

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